El Ministerio de Defensa definió la adquisición de seis
aviones cazabombarderos a Francia por un total de 10 millones de dólares. Se
trata de los modernizados Super Étendard el mismo modelo que los utilizados por
Argentina durante la guerra de las islas Malvinas; también se sumarán barcos
patrulla y los Hércules serán modernizados. En lo que será una de las compras más relevantes en
materia de reequipamiento militar de la era de Mauricio Macri, después de mucho
tiempo.
Los aviones que se incorporarán a la Aviación Naval están modernizados y formarán parte del nuevo equipamiento militar que está dispuesto a adquirir el gobierno de Macri en lo inmediato.
Fuentes del Ministerio de Defensa, informó que la compra a
Francia de 6 aviones Dassault-Breguet Super Étendard Modernisé, se concretará
en junio próximo, según informó el portal infobae.
Los cazabombarderos diseñados por Dassault-Breguet para la
Armada francesa y que Argentina compró, 14 unidades, de fábrica a Francia, para
la Aviación Naval a principio de los ´80. Dichos cazabombarderos pueden operar
desde portaaviones – Argentina envió a desguace su único portaaviones el 25 de
Mayo- durante la administración de Menem, dejando a toda la flota de aeronaves
embarcada de la Armada solo operando desde base en tierra.
El Super Étendard fue utilizado por la Argentina durante la
guerra de las Islas Malvinas en 1982. Operando con la 2º Escuadrilla de Caza y
Ataque del Comando de Aviación Naval dependiente de la Armada Argentina,
realizó tres ataques con misiles antibuque AM-39 Exocet contra tres buques
británicos hundiéndose dos de ellos (HMS Sheffield el 4 de mayo de 1982 y el
portacontenedores Atlantic Conveyor el 25 de mayo de 1982 ¨Día de la Patria¨) y
posiblemente el tercero, identificado por los pilotos argentinos de los A-4C
sobrevivientes de aquel ataque que siguieron la estela del misil como el
portaaviones británico HMS Invencible y que niegan el hecho para no ser más
humillados.
Esta versión de Super Étendard, la ¨Modernisé¨, son
aeronaves más actualizadas que las
unidades argentinas, aunque ya usadas por la Armada francesa y retiradas de servicio en 2016. Sin embargo
las aeronaves argentinas aún conservadas esperando reparación, tienen menos
desgaste que las francesas, con lo cual podrían actualizarse con los
componentes de las nuevas unidades adquiridas.
En los planes de reequipamiento militar que está elaborando
el Ministerio de Defensa también figura la modernización de cinco aviones C-130
Hércules: dos ya listos y supervisados por técnicos de los EEUU en la fábrica
de aviones de la Argentina (FADEA). Se prevé que estos C-130 de la Fuerza Aérea podrán ser utilizados
también para combatir incendios.
"Los planes que estamos llevando adelante constituyen
uno de los mayores programas de reequipamiento militar y compra de aviones de
la Argentina de los últimos 15 años", dijo una fuente calificada del
Ministerio de Defensa que dirige Julio Martínez al portal de noticias infobae.
No obstante, los funcionarios del gobierno que trabajan en el tema desecharon
de plano la idea de que se esté pensando en comprar elementos por unos 2.000
millones de dólares, como se especuló hace unos meses atrás. En rigor, por la
compra que se prevé en lo inmediato, Defensa no tiene proyectada una suma mayor
a los 30 millones de dólares.
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