Fuerza Aérea Argentina: con aviones vetustos, y milagrosamente en vuelo gracias a las peripecias del personal que canibalizan aeronaves para conseguir repuestos
Aviones: muy pocos y muy viejos
Sin dudas, la Fuerza Aérea fue uno de los orgullos que supo
tener nuestra Nación en sus épocas doradas. Ya lejos han quedado esos tiempos
del desarrollo de aeronaves como el "Pulqui" y el "Pucará".
Ahora nos encontramos con una situación desesperante, pues imagínense que los
únicos cazas interceptores que tenemos son el "Mirage III", el
"V Mara" y el "IAI Finger". En verdad que en su momento
fueron muy buenos, pero estamos muy lejos de esa etapa; por no decir que en
otro siglo y estos sistemas ya estaban por debajo de los 'Harriers' británicos
en la guerra de Malvinas.
Además, no sólo por viejos es la crítica: el número de
aeronaves que pueden volar, lo hacen gracias a la voluntad y esfuerzo de
técnicos y pilotos, y es muy reducido e insuficiente para poder decir que
Argentina puede tener control aéreo en su propio territorio.
El problema de vieja data
La situación de decadencia se remonta desde el gobierno de Menem y toda la década kirchnerista. Luego de la guerra de Malvinas se complicó, porque la cantidad de
sistemas se redujo debido a los caídos en combate, la retirada de servicio de
los A4 y el proceso de recorte y sabotaje de nuestras fuerzas, que iniciaron
cobardemente (como es su costumbre) potencias extranjeras.
La
producción de los excelentes aviones de entrenamiento 'Pampa', el desarrollo comenzó en 1982, que siguen
siendo uno de los pilares del entrenamiento de los pilotos, pero durante la década kirchnerista,donde se prometió la construcción de 40 Pampas, no construyeron ninguno. La modernización de las unidades producidas décadas pásadas como ser la remotorización que elevó al status de
"Pampa II", se realizó en pocos aparatos.
En materia de compra de cazas, sólo se puede nombrar de
compra de viejos A-4M, sacados de los cuarteles de invieron de la US Navy, durante el gobierno de Menem, actualizados y redenominados como A4ar "Figthing Hawk", los cuales algunos protagonizaron
accidentes. Se los adquirió como un sistema provisorio hasta que se comprasen nuevos
cazas, pero todavía constituyen la columna vertebral de la Fuerza Aérea.
Al hablarse en los medios de incorporar
cazas vemos que el problema está en realidad en la gente, cuya importancia le
es demasiado ajena y lo consideran un "gasto innecesario" frente a
otras necesidades. Es verdad que es fundamental mejorar las escuelas y
hospitales, invertir en seguridad social e investigación científica.
Es inadmisible la insuficiente
cantidad de radares y de aeronaves que controlan la entrada ilegal de aviones
con mercancía ilegal. Es precisa una ley de derribo, previa advertencia al
piloto narco. Sólo así podremos frenar el avance de los estupefacientes y
resolver más tranquilos desde el interior.
Mirage accidentado en 2009 |
El tema de la FAA es un producto de incompetencia política
y, más que nada, de desinterés. No suma votos la compra y modernización de
nuestra flota aunque el propósito sea noble, debido a la ignorancia de nuestros
ciudadanos y la falta de disposición en nuestra Nación. Por lo tanto, a los
políticos poco les hace gracia gastar cifras millonarias en algo que no les
suma, y las vuelcan en innecesaria y costosa publicidad.
La pregunta es, ¿hasta cuándo?
Será hasta que un día nos invada algún país o se accidente
un piloto; será hasta que los ciudadanos se den cuenta que la tan gloriosa
fuerza que hizo estragos con la Royal Navy está en peligro de extinción.
Sólo esperemos que no sea tarde.
0 comentarios :
Publicar un comentario