En ese entonces, la compra abarcaba 24 aviones y alcanzaba una cifra de u$s300 millones.
Arribaron a Córdoba cuatro aviones de instrucción Beechcraft
T-C6+ Texan II, que fueron comprados a los Estados Unidos para modernizar la
flota de la Fuerza Aérea.
El primer grupo de aeronaves pertenece a un lote de 12 Texan
II, repuestos y equipos de soporte adicional, que fueron adquiridos por un
costo de más de u$s160 millones, según consta en la ampliación presupuestaria
del decreto 595 publicado en el Boletín Oficial en agosto pasado.
El origen de la adquisición se encuentra en la visita del
entonces presidente de los Estados Unidos Barack Obama, en marzo de 2016. A
partir de allí, como gesto político y señal de alineamiento por parte del
Gobierno argentino, avanzó una operación que fue confirmada en agosto del mismo
año.
La compra original era por el doble de aparatos por una cifra
de u$s 300 millones. La magnitud del contrato sorprendió porque –a los ojos de
algunos especialistas- la Fuerza Aérea podría haber destinado el dinero a otras
urgencias, como hacerse de un reemplazo para los interceptores Mirage (dados de
baja a fines de 2015). Ello hizo que el Gobierno argentino reduzca la compra a
solo 12 aeronaves lo que redujo el costo
a la mitad.
Estas cuatro aeronaves nuevas serán utilizadas para la
instrucción de los pilotos argentinos de combate, ya que en los últimos 10 años
los aviones utilizados para el entrenamiento de pilotos de la Fuerza Aérea
fueron dados de baja por su antigüedad, como el modelo estadounidense Mentor.
Aún así estos tienen capacidad también para conflictos de
baja intensidad. De hecho, una vez completado el lote de los 12 Beechcraft T-C6
Texan, no se descarta que alguna de estas máquinas sean utilizadas para el
control fronterizo del espacio aéreo nacional.
Actualmente, este tipo de avión es utilizado por las fuerzas
armadas de los Estados Unidos, Canadá, México, Grecia, Israel y Marruecos.
La compra de estos aviones forma parte de la reactivación
de la cooperación militar con Estados Unidos en todos los planos. De hecho en
Diputados resta aprobar la entrada de tropas extranjeras que ya tiene media
sanción en el Senado para que las fuerzas militares de Estados Unidos y
Argentina realicen en octubre un ejercicio militar conjunto en el Atlántico
sur.
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