Desde 2016, tras el
cambio de Gobierno y un proceso de reestatización que se había iniciado en
2009, FAdeA comenzó una nueva etapa en la que redujo su personal y buscó nuevos
negocios en el sector privado.
Sin embargo los antecedentes de la administración kirchnerista en la administración de la Fábrica Argentina de Aviones no son las mejores.
Sin embargo los antecedentes de la administración kirchnerista en la administración de la Fábrica Argentina de Aviones no son las mejores.
FAdeA, ubicó a la
Argentina como el sexto país con más producción de aviones del mundo gracias a la
construcción del mítico Pucará y los famosos Pulqui I y II. Sin embargo, el
panorama durante el kirchnerismo el panorama fue totalmente inverso. Pese a que
la firma "no fabricó ningún avión en décadas", en 2015 había tenido
un déficit de 1.401 millones de pesos.
En 2009, la
entonces presidente Cristina Kirchner decidió poner fin a la concesión que la
firma estadounidense Lockheed Martin tenía sobre la Fábrica Argentina de
Aviones "Brigadier San Martín" SA (FAdeA). Pagó 110 millones de
dólares por sus acciones. El 99% quedaron en poder del Ministerio de Defensa y
el 1% restante fue para Fabricaciones Militares.
FAdeA paralizada
Con la llegada
del gobierno del presidente Mauricio Macri se encargó una auditoria a la consultora
Deloitte que comenzó a revisar la gestión de Raúl Argañaraz, un contador ( segundo presidente
de FAdeA designado por el kirchnerismo) que anteriormente como director
financiero de ENARSA, había firmado el pago del alquiler del avión que
trajo al país al venezolano Antonini Wilson y su famosa valija.
El informe de
Deloitte concluyó que durante el mandato en FAdeA del kirchnerista Argañaraz "se
anunciaron planes productivos rimbombantes acompañados de contrataciones y
compras de forma irregular". Tal es así, que el propio directorio lo
responsabilizó por un desvío de fondos de 300 millones de pesos.
En 2013, La
Cámpora tomó el control de FAdeA a través de Matías Savoca
Una de sus decisiones más polémicas de Savoca fue pagarle 35 mil pesos a la actriz
Florencia Peña para brindar una charla de tres horas sobre violencia de género.
El contrato incluyó, además, 7.350 pesos por el IVA, los pasajes aéreos, el
traslado terrestre y el alojamiento en un hotel de 5 estrellas, lo que haría
trepar el caché por encima de los 50 mil pesos.
En 2015 se
pagaron 33 millones de pesos por horas extras.
En apenas dos
años, el déficit de FAdeA pasó de 150 millones de pesos en 2013 a 1.401
millones de pesos en 2015. ¿Los motivos? "Descontrol administrativo,
contabilidad opaca. Se utilizó FAdeA como fuente de financiación de compras sin
ningún beneficio y enormes erogaciones", advirtió el informe de Deloitte. Y
además se abonaron adelantos a proveedores por montos superiores a lo adeudado.
Luego de la
estatización de FAdeA, Nestor Kirchner anunció que se fabricarían 40 aviones
IA-63 Pampa III, se repotenciaría el Pucará, avanzaría el proyecto de avión de
la Unasur y se fabricaría un helicóptero sobre la base de un prototipo chino
(CZ 11). Lo cierto es que nada de eso pasó, el Unasur no pasó de ser un
proyecto que se abandonó, al igual que el helicóptero chino que solo fue
propaganda y el aparato quedó abandonado en los hangares de FAdeA. También el ex
director de producción, Tulio Calderón, agregó que junto a Invap FAdeA se
sumaría a la industria de los drones, cosa que nunca pasó.
Después se firmó
un acuerdo para la producción de piezas para el KC-390 de Embraer. Pero sólo se
entregaron tres de los cinco conjuntos de partes comprometidas con Embraer. El dato contrasta
con los 646 mil pesos que el entonces ministro de Defensa, Agustín Rossi, gastó
para agasajar con un almuerzo a 1.900 personas, en un acto que con el pretexto
del 87º aniversario de la empresa se utilizó para anunciar el acuerdo con la
compañía brasileña.
La reactivación de FAdeA
Para poder corregir
todos los desajustes hallados en FAdeA, luego de la auditoría llevada a cabo,
el gobierno de Macri tuvo que reajustar todo lo necesario para que la Fábrica
Argentina de Aviones volviera a producir aviones. Como parte de esto se
implementaros medidas poco populares pero necesarias, que fueron muy criticadas
por quienes llevar a FAdeA a una situación lamentable. Así se tuvo que terminar
con las horas extras, las designaciones, los viajes, los viáticos, las tarjetas
corporativas. Se estableció un sistema de jubilación anticipada, se
suspendieron los servicios tercerizados, se redujeron las gerencias, se
rescindieron contratos con abogados, se puso fin a un acuerdo con la
Universidad de San Martín y se achicaron las cajas chicas.
En 2016 se
realiza la primera modernización total de los aviones de transportes C-130
Hércules de la Fuerza Aérea Argentina en FAdeA. Y se realizó el primer vuelo
del IA-100 una aeronave demostrador tecnológico, monomotor, que es el primer
diseño en material compuesto construido en FAdeA.
En agosto de 2017
se vendió otro avión aeroaplicador Puelche, también construído en FAdeA y que
fue exportado a Paraguay.
La criticada
reestructuración, del presidente Macri sobre FAdeA permitió en 2018 comenzar a
fabricar y entregar los flamantes IA-63
Pampa III números de serie 1028, 1029 y 1030 a la Fuerza Aérea Argentina.
También se logró la certificación de los Pampa III.
Se firmaron
contratos para el mantenimiento de aeronaves civiles
FAdeA comenzó a
brindar servicios de mantenimiento y reparación de aeronaves comerciales de las
series Airbus 320 y Boeing 737 (Latam, JetSmart, Flybondi, Norwegian) y el
contrato con el Grupo Nordex para armar e integrar estructuras llamadas
“nacelles” destinadas a aerogeneradores eólicos. Este negocio recuperó galpones
–donde se lleva adelante la integración de más de 1.000 piezas para los
nacelles- que estaban literalmente abandonados. Hubo que invertir cerca de 100
millones de pesos en acondicionar maquinaria y puentes grúa que dio trabajo a
pymes cordobesas.
Sellaron alianza
con Etihad Engineer, lo que les permitió intervenir 7 aeronaves de Latam, firmaron
contrato con la empresa israelí IAI para proveerla de aeropartes, servicios e
ingeniería.
En 2018 se firmó
un contrato millonario por 100 millones de pesos con la empresa Israel
Aerospace Industries (IAI) para proveer ingeniería, aeropartes y servicios.
En FAdeA se refaccionaron helicópteros usados AB206 comprados a Italia y entregados flamantes a la Aviación de Ejército Argentino. También se reparó helicópteros Bell UH-1H Huey II del Ejército Argentino y aviones de transporte CASA 212 de la misma institución.
A mediados de 2019 se
intentó exportar aviones IA-63 Pampa III a Guatemala, operación que se frustró o quedó congelada
por problemas burocráticos del gobierno guatemalteco que se había comprometido
a comprarlos luego de firmar un acuerdo formal entre los Gobiernos de Mauricio
Macri y su par Jimmy Morales, que fue cuestionado en su país porque el acuerdo con FAdeA no había pasado por el Congreso de Guatemala.
También para este año FAdeA
entregará otro lote de tres aviones IA-63 Pampa III a la Fuerza Aérea
Argentina. El último previsto para este año el Pampa III matrícula A-704,
número de serie de fábrica AV 1032.
En junio de 2019
Fadea, firmó un acuerdo con JetSmart por un monto de US$28 millones para la
prestación de servicios de mantenimiento de componentes destinados a sus
aviones.
En octubre de
2019 la Fábrica Argentina de Aviones Brig. San Martín (FAdeA) y la empresa
Etihad Engineering, de Abu Dhabi, Emiratos Árabes Unidos, firmaron un acuerdo
para el mantenimiento, reparación y recorrida general de aeronaves
pertenecientes a las familias Boeing 737 y Airbus 320.
Un informe de
Gestión se muestra que la empresa llegó a un 80% en el objetivo de lograr el
equilibrio económico, y al fin alcanzar el 90%.
En 2019 FADEA
logró que 25% de sus ingresos provengan de acuerdos externos de la Fuerza
Aérea. La meta del actual presidente de FAdeA, Antonio Beltramone es alcanzar
el 50% en base a nuevos negocios : ampliando los servicios de mantenimiento al
sector aerocomercial privado y potenciar la exportación del producto estrella;
el IA-63 Pampa III.
FAdeA es socio de
riesgo de Embraer Military, a la que abastece con aeropartes por ser integrante
del proyecto del avión militar de transporte Embraer KC-390, pero las recientes
confrontaciones verbales entre el candidato kirchnerista del Frente de Todos,
Alberto Fernández y el presidente brasileño Jair Bolsonaro generan
incertidumbre en la operatoria bilateral entre fábricas. Disputas como esa
lesionan la confianza de los clientes en la continuidad de la alianza.
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