La Fuerza Aérea de Estados Unidos busca un nuevo avión de entrenamiento avanzado

El Northrop T-38 Talon utilizado como entrenador avanzado por la Fuerza Aérea de Estados Unidos

La Fuerza Aérea de Estados Unidos busca un nuevo avión de entrenamiento avanzado

La Fuerza Aérea de Estados Unidos (USAF) está buscando reemplazar sus viejos entrenadores jet T-38 Talon con unos 350 nuevos aviones. Tres equipos ya presentaron sus ofertas de aviones para el programa T-X, uno de los equipos que participa dicho concurso es la asociación entre la Boeing y el grupo aeroespacial sueco Saab, que presentó un nuevo entrenador biplaza supersónico para concursar con sus competidores.

El entrenador T-X de Boeing está diseñado para volar como un caza de combate, con una configuración de doble cola ó bideriva, similar a la F-35 y F-22 para darle a la aeronave un manejo óptimo a todas las velocidades. El Boeing T-X utiliza solo un turbocompresor GE F404, el mismo motor que se encuentra en el F / A-18, lo que le otorga a este avión de entrenamiento la alta capacidad de G y alto ángulo de ataque necesaria para imitar el vuelo en los cazas modernos.

Presentación del T-X de Boeing Saab

El avión utiliza algunas tecnologías que se encuentran en el F / A-18 Super Hornet, desarrollado por Boeing, así como el caza multirol Saab Gripen. Boeing ya fabricó un T-X que voló por primera vez el 21 de diciembre del 2016, y un segundo avión también está casi terminado, que comenzó con las pruebas estructurales en los próximos días.

Los asientos en posición de gradas al estilo de los estadios, proporcionan máxima visibilidad en la cabina para que los instructores y estudiantes visualicen mejor el espacio aéreo en las prácticas de maniobras aéreas y entrenamiento de combate. Un avanzado sistema de aviónica y pantalla grande se incluyen para familiarizar a los pilotos con los sistemas de alta tecnología que se hallan en los cazas de quinta generación como el F-35. Los sistemas informáticos de la cabina, como los  simuladores en tierra, proporcionan una serie de módulos de formación para los estudiantes y herramientas para los instructores en lo que Boeing llama su "aula del cielo".

Cuando se trata de aviones de entrenamiento, es crucial que las operaciones de mantenimiento sean lo menos dolorosas posibles, por lo que se utilizó un diseño de ala alta para facilitar el acceso a los paneles del Boeing T-X. Optimizado para el equipo terrestre de la Fuerza Aérea, el T-X utiliza menos sujetadores para los paneles y partes de proveedores establecidos para agilizar las necesidades de mantenimiento del entrenador.

Para ganar el contrato de 11.000 millones de dólares, Boeing y Saab tendrán que superar a los de Lockheed Martin, que se asociaron con la Korea Aerospace Industries (KAI) para desarrollar el entrenador T-50A, una versión mejorada del KAI T-50 Golden Eagle usado por la fuerza aérea surcoreana.

Otro de los participantes del proyecto T-X es la ascociación de la Northrop Grumman, con BAE System y L-3 Communications en su versión del T-X, el "Modelo 400", que hizo su primer vuelo en agosto del 2016.

Finalmente un cuarto competidor es la asociación de Raytheon, Honeywell Aerospace, CAE y la compañía aeroespacial italiana Leonardo-Finmeccanica, que ha desarrollado el entrenador T-100, una versión modificada del Alenia Aermacchi M-346 Master utilizado por las fuerzas aéreas italiana e israelí.

La Fuerza Aérea de Estados Unidos (USAF) emitió su solicitud a fines del 2016, y habrá una pre-selección prevista para el 2017. La capacidad operativa inicial para el entrenador está prevista para 2024. Como ya se ha informado, cuatro equipos conformados por las mejores compañías aeroespaciales en el Mundo presentaron sus cuatro ofertas de aviones, donde ganará el mejor entrenador.