El Gobierno argentino busca adquirir nuevos aviones en
Europa y en EEUU, ya que en 2018 sus aviones de combate A4 no podrán volar más.
La Fábrica Argentina de Aviones asegura que estas medidas no afectarán la
producción del Pampa III, escribe Luis Roberto Kempa en su artículo para la
Voz.
La polémica en Argentina surgió cuando se hizo pública la
intención del Gobierno de comprar aviones en Europa y en EEUU, lo cual provocó
cierto malestar en la Fábrica Argentina de Aviones (FADEA) por temor de que
esto podría afectar sus planes para la producción del Pampa III, precisa la
publicación.
El Ministerio de Defensa, sin embargo, ha negado que haya
contratos firmados.
Las discusiones comenzaron cuando se supo que la Fuerza
Aérea desprogramó los últimos tres aviones que quedaban en uso. Además, se
informó hace un mes que en el 2018 quedarán fuera de servicio 15 cazas A4-AR
Fightinghawk.
El artículo precisa, que el país ha perdido, desde 1982, al
menos 80 aviones en la Guerra de las Malvinas, a los que se le suman los
últimos Mirage III, recientemente desactivados, por lo que para el 2018 el Estado
no contará con unidades en Según el Ministerio de Defensa, se barajan
diferentes posibilidades de compra. Se ha propuesto comprar un escuadrón Mirage
F-1 a Francia, aunque la primera opción sería un M-346 Master de la italiana
Aermacchi en Italia.
Durante la visita del presidente norteamericano, Barack
Obama, se ofrecieron 24 aviones T6-C Texan II por 300 millones de dólares.
Desde la FADEA, sin embargo, aseguran que el Texan no está
en condiciones de competir con los aviones argentinos.
Pese a todo, la Fábrica Argentina de Aviones afirma que el
contrato para la fabricación del Pampa III GT, de uso táctico, está asegurado.
El contrato prevé la construcción de 40 aviones para el
2017. Ya hay un Pampa III en funcionamiento y se planea producir dos unidades
más para el próximo año.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario